La inmigración es la gran asignatura pendiente en la construcción positivista de los Derechos Humanos. La UE ha pasado del inviable discurso político de “inmigración cero” implementado desde los años setenta al discurso de la inmigración como “oportunidad” que intenta ahora propagar ante las críticas de la “Fortaleza Europea”. La inmigración parece ser la respuesta a muchos de los problemas provocados por el enjevecimiento de nuestras sociedades: -aumento de las tasas de dependencia (clases pasivas/población activa), escasez de mano de obra y en definitiva, además de hacer frente al negativo crecimiento demográfico, previene los riesgos de recesión del crecimiento económico a largo plazo(2). Pero, como cualquier aumento de población, la inmigración no puede quedar al margen del orden público ni puede tener reservado otro fin que el de la integración de los nuevos ciudadanos.
jueves, 21 de septiembre de 2006
LA U.E EMPIEZA A IMPLANTAR EL DISCUROS DE LA IMIGRACIÓN COMO OPORTUNIDAD
La inmigración es la gran asignatura pendiente en la construcción positivista de los Derechos Humanos. La UE ha pasado del inviable discurso político de “inmigración cero” implementado desde los años setenta al discurso de la inmigración como “oportunidad” que intenta ahora propagar ante las críticas de la “Fortaleza Europea”. La inmigración parece ser la respuesta a muchos de los problemas provocados por el enjevecimiento de nuestras sociedades: -aumento de las tasas de dependencia (clases pasivas/población activa), escasez de mano de obra y en definitiva, además de hacer frente al negativo crecimiento demográfico, previene los riesgos de recesión del crecimiento económico a largo plazo(2). Pero, como cualquier aumento de población, la inmigración no puede quedar al margen del orden público ni puede tener reservado otro fin que el de la integración de los nuevos ciudadanos.
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